miércoles, 2 de diciembre de 2020

Cuando te hablé del camino

–¿Qué esperabas cuando te hablé del camino hacia tu naturaleza? ¿Que ese destino sería un lugar majestuoso? ¿Que el esfuerzo de ese largo y angustiante camino, de ese ripio oscuro, iba a ser recompensado una vez que llegaras finalmente al fondo de tu naturaleza? ¡No! Ella será de una modestia solamente equiparable al paisaje modesto que tuviste frente a tus ojos durante todo el trayecto. Tan modesta que si no fuera porque tuviste que detenerte, ni siquiera te darías cuenta que llegaste al final de tu camino.