
Salimos campeones, sí, ya nadie nos puede venir a romper las bolas. Ganamos ocho partidos de once, goleamos en muchos, gustamos en otros, pedimos la hora en algunos, pero los ocho partidos los ganamos y ahora somos campeones. Hay una tabla que nos pone segundos, la Tabla de Maldonado, pero esa tabla es para los giles y hecha por giles. A todo esto, el equipo de Maldonado dio asco otra vez y quedó a mitad de tabla, sin pena ni gloria, algo que realmente lamentamos, o mejor dicho L(amen)TA(mos).
Pero para qué calentarse con las manos negras que con sus dedos negros nos revuelven el orto siempre que pueden; hoy La Risa pudo festejar tranquilo, dar la vuelta, cantar, escabiar, y el resto nos chupa un huevo. No tenemos de qué quejarnos, y el que se quiera quejar piense en las veinte bengalas de humo que se tuvo que meter CQC en medio del ojete: siempre hay gente que está peor.
Hay que hablar de lo futbolístico, no, no se levante señora, son apenas un par de párrafos. Quedó demostrado que somos un buen equipo que se le puede plantar a cualquiera. Veníamos de una racha mala, de tocar fondo, un fondo pulenta, un fondo de más de un año de no ganarle a nadie, un fondo de ir a buscarla a la red de forma automática. Pero salimos. Con los mismos jugadores, con solo una incorporación, con toda la banda de Maldonado rompiéndonos las bolas, salimos. Hoy, seis meses después, ganamos el campeonato, y lo hicimos a lo grande, superando al rival todo el partido y embocando en los momentos justos. No había mejor forma de cerrar este semestre casi perfecto.
Muchas gracias a Bonadeo, un jugador de la puta madre, figura indiscutida del Uvita 2011, y si quedaban dudas hoy demostró, con dos golazos, que es el mejor. Sin él no hubieramos llegado ni al kiosco de la esquina.
Muchas gracias a Weidenfeller, arquerazo salva partidos que este Torneo aprendió a sacar, tal vez su única cuenta pendiente.
Gracias Miguens, tuviste un Torneo de mierda pero lo tuyo va más allá. Presencia, Miguens, lo tuyo es la presencia y siempre estuviste, un último hombre de acero.
Gracias García, motor, corazón, esqueleto de La Risa. Ya lo hemos hablado con algunos, García es el hincha número uno de La Risa. Pero ahora también aprendió a jugar y tuvo un Torneo inolvidable.
Muchas gracias a Crotto, que con sus treinta pirulos y sus ganas de quedarse los sábados tranquilo viendo películas con su mujer entendió lo que significaba La Risa, y dejó todo y mucho más, y ayudó con goles, asistencias, pivoteadas, arengas, etcétera. Hoy jugó su último partido, lo esperan tierras mejores. Toda la suerte del mundo para él.
Gracias a Martinez, otro que tenía mil razones para quedarse en su casa. Nada de eso, el Manteca salió adelante porque tiene unos huevos del tamaño de todo Pilar, y tampoco escatimó nada, dejó la vida en cada pique, cada relevo, cada trabada, y cuando no daba más vomitaba y volvía a correr, literalmente, así es Martinez, a él no le vengan con boludeces.
Y me da paja escribir uno por uno, pero gracias a todos, muchachos. Cada uno, desde su lugar, aportó lo suyo. Creo que todos disfrutamos como nunca estos diez o quince sábados, ahora hay que seguir por donde venimos.
Por último, quiero pedirle, en nombre de todo el equipo, públicas disculpas al señor Drago. El podrá ser lo que sea, pero para un futuro tenemos que aprender que para que no nos jodan no tenemos que joder a nadie, solo así nos van a dejar en paz. Esto es como la cárcel pero mucho más cool (?).

El fantasma de la E(?)